Risotto Bianco

Ésta receta de risotto es del libro "La cocina italiana de Jamie", de Jamie Oliver, y para mi gusto está espectacular, y para los que me suelen acompañar también, siempre me están pidiendo que lo haga ¿por qué será? :)

Ingredientes (6 personas)

 

1,1 litro de caldo (pollo o verduras)

2 cucharadas de aceite de oliva

un trozo de mantequilla

1 cebolla grande pelada y muy picada

2 dientes de ajo pelados y muy picados

1/2 cabeza de apio pelado y muy picado

400 gr. de arroz para risotto (yo uso arroz Bomba)

2 copas de vermú blanco seco (yo uso Martini Blanco)

Sal y pimienta negra recién molida

70 gr. de mantequilla

115 gr. de queso parmesano recién rallado

 

Preparación

 

1) Calienta el caldo. En otra cazuela, echa el aceite de oliva y la mantequilla, añade la cebolla, el ajo y el apio y saltéalos lentamente unos 15 minutos sin dejar que se doren, y obtendrás un sofrito. Cuando las verduras se hayan ablandado, añade el arroz y sube el fuego.

 

2) El arroz se freirá, así que no dejes de removerlo. Al cabo de un minuto, quedará ligeramente translúcido. Añade el vermú y sigue removiendo; emitirá un olor estupendo. El alcohol se evaporará y el arroz conservará una esencia muy sabrosa, con el toque de vermú.

 

3) Una vez se haya reducido el vermú, añade el primer cucharón de caldo caliente y un buen pellizco de sal. Baja el fuego al mínimo para que el arroz no se cueza demasiado rápido por fuera. Sigue añadiendo cucharones de caldo y removiendo el arroz para que se extraiga el almidón, procurando que absorba cada cazo de caldo antes de echar el siguiente. Tardará unos 15 minutos. Pruébalo para ver si está cocido. Si no, sigue añadiendo caldo hasta que el arroz quede blando pero no pastoso. No te olvides de comprobar el punto de sal y pimienta. Si se termina el caldo antes de que el arroz acabe de cocerse, añade un poco de agua hirviendo.

 

4) Apártalo del fuego y añade la mantequilla y el parmesano. Remueve bien. Tapa la cazuela y deja reposar dos minutos. Esa es la operación más importante para hacer un risotto perfecto, y es cuando acaba de quedar cremoso y jugoso. Cómetelo lo antes posible, para que conserve su estupenda textura.